En contra del dogma
Lo que no alcanzamos a ver los detractores del dogma es que en nuestra reacción solemos ser -y aquí viene el plot-twist- dogmáticos.
Es la maldición del alternativo: creer que la alternativa es buena por el simple hecho de la alternativa.
Es la gran mentira de ciertas universidades que se jactan de enseñar a sus alumnos pensamiento crítico cuando en realidad no están haciendo otra cosa que indoctrinarlos. Se piensa critico respecto de lo establecido (¿no son acaso las palabras status quo y problemática las que más figuran en los ensayos universitarios?), pero nunca se cuestiona el cuestionamiento.