Mi amiga Christine se va a molestar cuando le diga que me dejó el avión. Según ella, perdí el avión, no me dejó. Con el lenguaje, dice, también somos expertos en victimizarnos.
En todo caso me dejó el avión, y aquí estoy, en un aeropuerto a medio cerrar, al que le quedamos en total diez personas y solo la mitad preferimos estar acá adentro, encerrados.
«Tómale una foto a ese letrero y escribes sobre la perspectiva: de cómo unos solo ven el letrero de De Lolita, mientras que otros ven el atardecer». Esa fue la sugerencia.
La idea no es mala, pero este newsletter es mío. Y yo soy su esclavo. Por eso no escribo sobre De Lolita, sino de este newsletter y de yo, que soy su esclavo.
No se me ocurrió un solo tema en toda la semana, pues estuve de viaje. Escruté en mi cabeza y simplemente en mi mente nunca estuvo. No había disposición para escribir y aún así aquí estoy.
Estoy leyendo a Carolina Sanín, al man de productividad, a la vieja rusa que escribe monólogos de Chernobyl y acabo de leer sobre la vida de Roosevelt, ¿qué me inventó para el newsletter? En blanco.
Entrevisté a Bermudez, a Quintero, a Camargo y hasta a un ciclista, ¿qué será que de ahí saco? Y aún: la mente en blanco.
Soy esclavo de este newsletter porque así lo dispuse. Porque es mala idea confiar en uno mismo en esta era, la de las distracciones y los lujos.
Mi filosofía es que hay que forzarse a uno mismo. Pero uno no es capaz de forzarse a sí mismo. Esto a punta de fuerza de voluntad no da. Algo hay que inventarse. Una promesa de mentiras, pero rígida. Un sistema que reemplace la voluntad. Un compromiso individual, pero ineludible.
Este newsletter es una maravilla porque si lo publiqué esta vez—a pesar del vuelo que me dejó, a pesar de mi pelea con la señora de Satena (a la que incluso le pedí su nombre completo, como hacen los clientes histéricos), a pesar de una semana en la que no pensé en nada—lo más probable es que lo publique el resto de veces.
Soy esclavo de este newsletter porque así lo quise. Curiosamente, soy el primer esclavo que necesita serlo.
Recomendación de la semana
Video: How to Force Yourself to Learn Stuff de Johnny Harris
Johnny Harris es un prominente youtuber que hace videos sobre mapas, fronteras, e historia. Ocasionalmente publica sobre un tema nada que ver y en este caso le salió una joya muy a propósito de ser esclavo y forzarse.
Está en Youtube.