Mi filosofía de productividad y las reuniones en las mañanas
Siempre he pensado que para mí sería muy difícil trabajar en una empresa. La sola idea de tener una reunión el lunes a primera hora me parece espantosa. Y es que va en contra de mi filosofía de productividad. Mi filosofía de productividad parte de mi entendimiento de que el trabajo humano es acerca de energía que se invierte, no del tiempo que transcurre. Visto así, la productividad tiene que orbitar alrededor de una obsesión: usar la energía de la manera más óptima posible. ¿Una manera subóptima de usar la energía? Estar atrapado en una reunión en las horas en las que uno tiene mayor capacidad de concentración. Para la mayoría de personas —sin duda es mi caso— la energía mental alcanza su pico en las horas de la mañana. El trabajo de muchas personas está estructurado en contravía de la biología: los altos energéticos los desperdician en tareas que